HIJA DE LA LUNA
COSECHA DORADA
COSECHA DORADA
Impossible de charger la disponibilité du service de retrait
Dicen que existe un ritual que muy pocos recuerdan: la invocación de la Cosecha Dorada. No era un banquete, sino un hechizo creado a partir de lo sencillo, lo esencial, lo que la tierra ofrece con amor.
En el centro de la mesa sagrada se alzaban los dones: la zanahoria, raíz luminosa que guarda la fuerza del sol; la mantequilla cremosa, símbolo de abundancia y hogar; y la nuez moscada, chispa secreta que abre los caminos de la fortuna. Unidos, formaban una ofrenda viva al invierno, un pacto para que la escasez nunca venciera al espíritu humano.
Encender esta vela es más que encender una llama: es recrear aquel antiguo rito, dejar que el aire se impregne de gratitud y recordar que la verdadera riqueza no está en lo grandioso, sino en la magia que habita en los pequeños frutos de la tierra.
Partager
