LUZ DE MEDIA NOCHE

Detalles del producto 

cera se soja / 160g

En el corazón de un pequeño y encantador pueblo, donde el otoño parecía reinar todo el año, se encontraba una cafetería tan especial que se había convertido en el refugio favorito de sus pintorescos habitantes. Se llamaba "La Esquina del Viento", un nombre que evocaba la magia de las estaciones cambiantes y las hojas crujientes bajo los pies. Era un lugar cálido, acogedor, y siempre olía a especias y secretos por descubrir.

Cada rincón de la cafetería estaba decorado con cariño: mesas de madera gastada por el tiempo, ventanales que dejaban pasar la luz dorada de las tardes otoñales, y estanterías llenas de libros viejos que parecían haber sido leídos mil veces. Sin embargo, lo que realmente hacía de La Esquina del Viento un lugar único, era la famosa vela que se encendía todas las noches, justo al caer el sol. Aquella vela, conocida como Luz de Media Noche, había sido un regalo de un viajero misterioso que, al parecer, conocía los secretos de los aromas y la nostalgia.

Cuando la dueña de la cafetería encendía la vela, el ambiente se transformaba por completo. El cálido aroma de chai latte invadía el aire, con sus notas de cardamomo y clavo, envolviendo a todos los presentes en una sensación de hogar. A menudo, los clientes cerraban los ojos por un instante, dejando que los envolviera esa fragancia tan especial, que traía consigo memorias de otros otoños, de momentos perdidos en el tiempo.

Con cada inhalación, se sentía la suavidad de una crema de leche picante, que añadía una nota de confort a la atmósfera, como si el aire mismo fuera una taza de chai humeante que uno podía beber con el alma. La vela Luz de Media Noche no solo iluminaba la estancia, sino que parecía contar una historia a través de su luz parpadeante y sus aromas envolventes.